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Indexados

17.12.22



En el ahora habitan los fantasmas del pasado y del futuro.



Espectral

7.5.22



Con el tiempo te conviertes en un fantasma que mira al cielo para ver si viene lluvia.




Virtualidades

3.5.22



Hay lugares poblados de recuerdos y habitados por personas reales que son solo fantasmas.



Espanto

3.7.21



Alguien me ha dicho que se ha asustado al verme. Es el primer paso antes de terminar por convertirme en un fantasma.



Espectros

27.11.20



Convivimos con fantasmas a todas horas. Fantasmas que habitan y recorren las galerías de nuestra imaginación y se alojan en cualquier apartamento de la edificación mental. ¿Cómo sino explicar el caso de la vecina del tercero? Acostumbrada a la confianza que le confiero, con los años me va contando historias de su permanente contacto con unos antiguos inquilinos de su vivienda, que vuelven cada día en busca de algo que dejaron sin hacer en su anterior vida. Como su marido no la cree, un día se golpeó con un palo y se volcó la carne de membrillo por encima, prueba del martirio por el que está pasando ante aquellos que no la creen y le dicen que está loca. Yo la tranquilizo y le digo que mi cabeza es un lugar común de apariciones, muchas de ellas escapadas de los libros leídos y otras recreadas por el recuerdo.



Bronceados

2.4.08




Según advierte Cioran, «la palidez nos muestra hasta dónde puede el cuerpo comprender al alma». Aún recuerdo cómo me sorprendió el rostro pajizo del primer cadáver que vi cuando era niño y su inmovilidad. Ahora entiendo por qué el color de los fantasmas.



Fantasmas

17.4.07




¿Cómo vencer los fantasmas personales? Para no engrandecerlos lo mejor es no mirarlos, no fijarse en ellos, hasta que se desvanezca su insustancia. Los fantasmas se alimentan de nuestras miserias, de nuestros miedos y ofuscaciones. Si lo sabemos llevar terminarán por ser inocuos.



Ouija

16.3.07


En la época universitaria solíamos jugar a la ouija con un vaso de cristal boca abajo en la mesa camilla. Nos divertía, en las largas noches de desestudio, convocar a los espíritus.

Unas veces nos reíamos mucho, al preguntar, qué nota tendríamos en los exámenes. Otras, en cambio, el miedo nos encerraba a pasar la noche en una sóla habitación.

Hoy, olvidados los espíritus de noches estudiantiles, somos nosotros quienes acudimos a aquella mesa como fantasmas de un tiempo pasado.