Todos los libros

23.4.15



En cierta ocasión escuché a la escritora Ayes Tortosa apelar a la retirada de los libros tóxicos: «con la Literatura ocurre igual que con la Medicina. Si el paciente toma un fármaco equivocado puede empeorar o incluso morir. Y es que lo mismo que el Ministerio de Sanidad retira, de vez en cuando, medicamentos que son perjudiciales para la salud, se deberían de revisar todos aquellos libros tóxicos, plagiados, perdón intertextualizados, clónicos, incoloros, inodoros, insípidos, que sólo sirven para enredar. ¿Cuántos lectores, sobre todo jóvenes, no habrán muerto a causa de un libro tóxico?» Quedé perplejo hasta que el gran escritor Günter Grass me aclaró la cuestión: «incluso los malos libros son libros, y por lo tanto sagrados».



3 apostillas:

Juan Poz dijo...

Este panfilismo sacralizador del libro sí que es un absurdo equivalente al de los indios del Nuevo Mundo, quienes, porque la Biblia era un libro sagrado, extendían la sacratidad a los de Caballerías y creían a pies juntillas sus muchos disparates. Respecto de los tóxicos, pues pasa como con las setas, los que caen a tu lado por ingerir las que no se debe, han de servirte de aviso...

Joselu dijo...

Creo que es en El Lazarillo donde se lee que no hay libro que por malo que sea no guarde algo bueno. Es difícil decir qué es un libro tóxico. Pienso en el libro de Hitler, Mi lucha, pienso en otros panfletos de la izquierda que han llevado a desencadenar terribles dictaduras convenciendo a los lectores de la necesidad de la lucha armada. La mala literatura es eso, mala literatura, pero, aun ella, es indiferente en ese sentido. Pienso que los libros tóxicos son los de contenido político, que han movido la historia hacia la sangre, pero, por otro lado, la han hecho avanzar.

Isabel dijo...

Puede pasar lo mismo con blogs o paginas web??