Exprimidos

29.11.14



El sistema quiere envejecer a sus operarios en la máquina del trabajo. Les parece insuficiente el 'jámago' que hasta ahora les estaban sacando. Ya lo pronosticó Hume: «el trabajo y la pobreza, tan aborrecidos por todo el mundo, son el destino seguro de la gran mayoría».



1 apostillas:

Joselu dijo...

El trabajo es muy interesante para la vida. Tal vez no importaría alargar su duración, pero eligiendo semanas de diez a quince horas. Quiero decir que hasta cierta edad serían aplicables las jornadas habituales, pero a partir de los cincuenta y cinco debería haber una reducción radical de dicha duración. Creo que muchos seguirían trabajando con una dedicación que permitiera seguir en el mundo del trabajo pero a la vez estar liberado de peso y extenuación. El sueldo sería menor en espera de la jubilación definitiva.